domingo, 17 de noviembre de 2013

Reflexiones desde la cima.

Desde la cima o más bien desde un bus.
Adoro los buses.

"Hoy es una tarde de estas de peli, manta y sofá, realmente no te apetece hacer nada en absoluto pero te mueres de ganas por algún plan. De repente piensas "necesito un aire, voy a darme un paseo" y sales. No hace frío, pero se está fresco, tampoco hace mucho viento pero siempre hay una brisilla. Perdido en tus pensamientos vas siguiendo un rumbo que nadie marca, quizá el destino que te quiere llevar a algún lado ¿crees en el destino? A veces si y a veces no, es difícil que te decantes al cien  por cien en algo, eres así de naturaleza. Wow, ni te habías dado cuenta pero de repente te hallas ante las vistas de tu ciudad, se ha hecho de noche ya...ahora anochece tan pronto, es tan triste todo...esa parte de ti que no ama el frío echa de menos los días de verano. Y mirándola, pero mirando de verdad, fijándote con cada uno de tus sentidos te das cuenta, es preciosa, todas esas luces de simples farolas, letreros, luces de neón, todas ellas parecen estrellas, brillan tanto en comparación con el gris cielo. Ellas parecen susurrante cosas ¿las oyes? Respira hondo y piensa. Al igual que antes lo haces por primera vez, digamos que de normal eres una cámara desenfocada y en momentos así por alguna razón enfocas y ves. Normal que de diario no seas capaz de solucionar problemas cuando la máxima importancia que les das es "necesito tiempo para pensar" et voilá, lo tienes ahora, aprovecha. Tu cabeza realmente es un gran revoltijo de ideas y sentimientos aleatorios que se suceden sin lógica ninguna unos tras otros segundo a segundo, se van a amontonando, justo como la ropa en tu habitación. "Ya la ordenare cuando tenga tiempo". Ya, claro, sigues obviando la realidad hasta que esta deja de hablarte y pasa a gritarte en la cara y aún cuando esto ni funciona, golpea. Porque si, a veces vivimos con vendas que nos ponemos y un segundo no vemos nada y al siguiente ZAS! tanto se extiende a tus ojos que tienes que tomarte unos minutos para interiorizarlo. Es como si sólo conocieras tu ciudad y ahora sabes..hay un mundo ahí, millones de ciudades como la tuya..impresionante eh, tómate los segundos que quieras para reflexionar. ¿cuantas vendas tienes tú? ¿como de grande es tu montón de ropa? ¿cuanto más seguirás así? Hablando desde perspectiva propia es agobiante darte cuenta de lo pequeño que es lo que sabes o lo que piensas de normal. Una vez que profundizas parece no haber límite. Y para solucionar problemas igual, cuando ellos te dicen 'hola, aquí estoy' tu piensas 'bffff muy grande, muy vasto, no puedo, no quiero tampoco' y el problema (lamentablemente) no sabe solucionarse sólo, bueno existe también la técnica de la alfombra, esconderlo todo ahí y pretender que no existe. Funciona. De verdad. Pero un tiempo, luego un día te da por mirar y dices 'joder, no sabia que pasaba tanto'. Pero no te preocupes porque todo el mundo lo hace en algún momento. Para mi solucionar algo es como pintar un cuadro, no puedes pretender pasar un un lienzo en blanco a un bonito bodegón, es físicamente imposible además. Tienes que comenzar en alguna parte, esta esquina, o aquel boceto de unas montañas, da igual, no importa tanto el lugar como el hecho de que lo hagas. Y ahora que lo piensas, los humanos tienen un grave problema con decidirse a empezar. Tardamos demasiado. O simplemente ni nos atrevemos, ¿miedo a lo desconocido? No te digo yo que no, es más, todos lo tenemos y no te engañes, porque alguna vez lo hayas superado no significa que lo vayas a perder, es algo que siempre va a estar ahí. Es casi ridículo verlos animar a los demás a comenzar cosas cuando nosotros no salimos de la burbuja por ese miedo a "que pasará". Bueno sigamos, una vez hayas comenzado a darle pinceladas a la solución todo de repente parece más fácil, aparecen caminos donde antes no había más que blancura. Ya está, lo tienes. Fácil eh. Y aunque lo parezca todo tiene solución. Cuidado, que tenga solución no quiere decir que vaya a ser perfecto, no nos engañemos, pero al menos es algo. Un problema no se soluciona si no se empieza. Así que te aconsejo que de vez en cuando te dediques un tiempo a ti, que te tienes un poco abandonado eh, eso si, no va a ser fácil ni rápido ni, en casos, agradable. Pero ahora ponte a buscar y dime algo en esta vida que sea perfecto. No te molestes que no lo hay. Perfecto no es nada y perfecto es todo. Me parece que es algo imposible de alcanzar y al mismo tiempo estás justo encima. Tan variante, tan impreciso".

No hay comentarios:

Publicar un comentario