domingo, 17 de noviembre de 2013

"Nada"

No sé como empezar esto. Tantas cosas que decir y tan escaso el diccionario de términos que reflejen esa mezcla de sentimientos que mi corazón se empeña en hacer. Ojalá no tuviera que fingir felicidad, aunque ya ni se si es fingir. He estado practicando sonrisas y me sorprendo de lo fácil que me salen, automático. Supongo que para aquellos que no me conocen parece una perfectamente real, pero los labios mienten, te dicen lo que quieres oír, mas los ojos...no pueden. En los ojos está escrita la verdad que nadie es capaz de leer, la que prohíbo que lean, la que sólo yo entiendo. Esa mirada que dice "ayuda". ¿Ayuda a que? Te preguntarás. Ayuda de mi, alejarme de esto, quiero huir de mi propia mente que está enferma. Pensamientos infectados que recorren todo mi cuerpo a través de las venas, llegando a todos rincones. Comenzó poco a poco, apenas era perceptible incluso para mi misma tanto que ni me di cuenta de ello. Un día era feliz y al otro...no. Ya no sé cuando lo soy de verdad y cuando no. He perdido la capacidad de distinguir. Y no sé si se puede recuperar. Quiero volver a levantarme como lo hacía en mayo, cuando sentía que podía explotar de felicidad si me dejaba llevar. Ahora siento vacío dentro. Como un bosque quemado, un mar seco, una casa abandonada por sus dueños. ¿Y que es una casa vacía? Nada. ¿Que se hace con las casas que nadie quiere habitar? Las echas abajo y construyes una mejor. Supongo que debo acabar con esta parte de mi. Pero es lo que soy. No puedo acabar conmigo misma. Bueno, si que puedo. Olvidemos esto. No sé que hacer. De verdad que no lo sé. Quiero mejorar pero no veo como hacerlo. Estoy vacía y apagada y busco luz. Dios santo. Yo no quiero ser así. Por favor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario